Los adaptógenos son hongos, plantas o hierbas que contienen compuestos activos que pueden ayudar al cuerpo a adaptarse al estrés y mejorar su funcionamiento. Estas plantas han sido utilizadas en la medicina tradicional durante siglos y se cree que tienen efectos beneficiosos en la salud, como la reducción del estrés, la mejora del rendimiento físico y mental, y la regulación del sistema inmunológico.
Los adaptógenos trabajan a nivel celular para equilibrar el funcionamiento del cuerpo, ayudando a combatir el estrés físico y emocional. Estos compuestos activos también pueden ayudar a mejorar la resistencia física, la claridad mental y la capacidad de recuperación.
Algunos ejemplos comunes de adaptógenos incluyen la Ashwagandha, el Ginseng, el Reishi, la Rhodiola y la Maca. Cada adaptógeno tiene diferentes propiedades y beneficios para la salud, y pueden ser utilizados individualmente o en combinación con otros adaptógenos y suplementos para lograr los mejores resultados.
